Todo empieza con un beso

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El pasado Viernes 13 de abril fue el Día Internacional del Beso.

Sí, estáis leyendo bien, hay un día internacional para celebrar el placer de besarse…

La celebración de este día es más oficiosa que oficial ya que tiene su origen en el 13 de abril del año 2012 en Tailandia.

Allí una pareja batió el récord del mundo con el beso más largo de la historia que duró 58 horas, 35 minutos y 58 segundos.

¿Te puedes imaginar dando un beso de 58 horas? Más de 2 días besando sin parar…

Más allá de la anécdota, es un hecho que besarse tiene muchos beneficios tanto para la salud como para la sociedad.

Sus beneficios para la salud son variados pero los más importantes son los siguientes:

Es un antidepresivo, ya que cuando besamos el cuerpo libera oxitocina que es una hormona que nos provoca que nos sintamos con ánimo.

Es una buena alternativa para combatir momentos de estrés, de angustia, de depresión o de ansiedad.

Está relacionado con la prevención de problemas dentales y no porque es bueno cepillarse los dientes tres veces al día (y antes de besar más),

sino porque al besarnos estimulamos la secreción natural de la saliva lo que provoca que la saliva se regenere y elimine partículas y patógenos.

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También tiene que ver con la reducción de la presión arterial ya que al besarnos aumentamos los latidos de forma saludable y ayudamos a disminuir la presión sanguínea.

Por último, besar ayuda a mejorar la autoestima pues besar nos hace sentirnos queridos y nos ayuda a crear una relación de confianza con la otra persona.

Además besarse tiene beneficios para la sociedad ya que normaliza las relaciones amorosas entre las personas indistintamente de su género y de su orientación sexual.

Ven a besarte frente al mar y de paso come en nuestro restaurante mediterráneo en Valencia.

Besarse en público, y darse otras muestras de amor en está prohibido en algunos países del mundo como es el caso de Malasia o Baréin.

Hay países como los del sudeste asiático y algunos de Oriente en los que no está prohibido besarse pero no está bien visto.

Se evita besarse sistemáticamente por su especial concepción del espacio público y de las muestras de cariño.

Nos ha parecido interesante para este día recordar la secuencia de Cinema Paradiso.

En ella, un Salvatore ya director de cine de reconocido prestigio, revisa todos los planos de besos que el cura de un pequeño pueblo había censurado cuando él era pequeño.